El Hotel Amic estaba relativamente céntrico, pero había que coger taxi para desplazarnos al centro. El baño estaba integrado con la habitación, algo incómodo. El sistema de encendido de las luces por los pasillos del hotel, que era por sensores, tardaba en activarse, y casi siempre llegaba a mi habitación a oscuras, muy desagradable la verdad. Limpieza óptima, tranquilo, y poca calidad y variedad en el buffet del desayuno.
Aufenthalt im Hotel: Juli 2015