Una ubicación inmejorable. Una situación de las piscinas a pie de mar increible y la temperatura de su agua ideal. Pk sería un delito k estuviese fría y no poder disfrutar de su baño. Las habitaciones muy grandes y todas con vistas al mar. La decoración del hotel de estilo minimalista, moderno con elegancia, sencillez, y espacios amplios, diáfanos y en general una estancia y vistas muy agradables y relajantes. El único inconveniente, por ponerle algún pero, es una no excesiva variedad en la oferta de alimentos en el desayuno, y cierta incomodidad de la ducha.
Aufenthalt im Hotel: August 2009